top of page

La Aventura Atlántica

Con las exploraciones europeas, realizadas a partir del siglo XIII, la visión y los intereses expansivos de las diferentes monarquías europeas se exaltaron en pugna por la primacia por ocupar los territorios atlánticos insulares y las costas de África, especialmente por las Coronas de Portugal y la de Castillas. En consecuencia, el Archipiélago Canario dejó de ser el Finis Terrae del mundo grecorromano y altomedieval para convertirse en el “puente atlántico entre continentes”.

 

La situación se vio agravada, en la última década del siglo XV por el “descubrimiento” del Nuevo Mundo, ya que los “derroteros” para la navegación de ultramar hacia “Las Indias Occidentales”, situaron el citado Archipiélago como la escala de paso obligado, tanto de ida como de retorno de “la Carrera de Indias”, igualmente como el lugar de aguada y avituallamiento de los galeones, de ahí que, sus puertos se convirtieron en los “puertos de provisión” de la ruta comercial interoceánica indiana.

bottom of page