El Eterno Femenino y Sagrado
- Mynerva
- 14 mar 2014
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Actualizado: 1 nov 2021

DIVINIDAD FEMENINA
Este articulo forma parte de la novela: NOSOTRAS LAS DIOSAS.
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En el principio, la divinidad femenina estuvo presente en la cotidianidad religiosa y social de las diferentes etnias que poblaban el planeta, entre ellos los Mesopotámicos, los babilonios, los Cretense Micénicos, los egipcios, etc etc. por su manifiesta importancia en la creación de las diferentes especies.
De la observación constante de los fenómenos cósmicos, de la naturaleza y la luminaria más cercana al ser humano, la Luna, los antiguos concluyeron su importancia, ya en los ciclos de la fecundidad, ya en los cultivos y su producción, y hasta en los ciclos menstruales de la mujer, dando origen a una religión cósmica que implicaba constantes cambios en la cotidianidad de la vida y en donde el objeto de culto divino era la Madre Tierra o Pacha Mamma, por supuesto, todos los seres que la habitaban eran sus hijos, sometidos a sus leyes naturales.
La identidad de la Mujer con la Madre Naturaleza, el misterio de su sexualidad, su fecundación y su facultad de progenie de la especie, contribuyeron grandemente en la creación del culto de la GRAN DIOSA y sus sacerdotisas, pero la GRAN DIOSA no era solo una divinidad; ella era fascinación, era unificación de una multiplicidad, una unidad nacida de lo visible y trascendente, lo cual sigue siéndolo hasta nuestros días.En la antigüedad la Luna representaba el principio femenino. Cuando se descubrió su influencia sobre los fluidos y sobre el crecimiento de los frutos de la Tierra, en muchas civilizaciones fue elevada a divinidad y adorada como la "Gran Madre".
Los egipcios consideraron su importancia igual a la del Sol y la representaron siempre estrechamente ligada a éste. La Luna en la Mitología está simbólicamente ligada a la naturaleza y a todo lo femenino. Si esto por una parte representa la vida y todo aquello que pertenece al regazo materno, por otra parte puede suscitar en el hombre temores inconscientes por cuanto de misterioso y arcano él ha visto siempre en la naturaleza femenina, estando por tanto en la base de su misoginia.
La Luna es también la imaginación, la fantasía, el sueño, la noche y la memoria.“Beraeschith bara Elohim eth ha-schamain v’eth ha-aretz” El primer versículo del Génesis hace saber que no se trata de una “creación” o al menos de una nueva idea creatríz original. Una vez más, ratifico que la lectura del Génesis: “Al comienzo Dios creó los cielos y la tierra” es una traducción completamente arbitraria, ya que el texto original si no es claro para una traducción profana, no es menos profundamente Iniciática. “Beraeschith bara Elohim eth ha-schamain v’eth ha-aretz”, es un principio ante todo “Dios era un principio inconsciente e inteligente” y no pues un “comienzo” –como concepto de tiempo-. Hay una idea: un “Pensamiento” original y de ese Pensamiento Inteligente de Dios emana “inconscientemente” aquello que seguirá ...Además la segunda palabra de ese versículo “bara” que se tradujo por “creó”, es más sutilmente caracterizada por “emanó”.Para una mejor comprensión del Génesis, voy a transcribir las palabras textuales de mi padre en una de sus enseñanzas iniciática: -“…Hija no olvides que el Génesis, es la Historia de la Creación, que si se toma al pie de la letra su contenido veremos que es un absurdo su realización, convirtiéndose en una historieta que hace reír a cualquier colegial actual.
En verdad, el Génesis oculta un profundo sentido simbólico, solo descifrable con claves y estas claves se encuentran: En el simbolismo egipcio; en el simbolismo de todas las religiones del antiguo ciclo y en la síntesis de la doctrina de los INICIADOS, los cuales permanecen activos en todas las Eras…”-Retomando los conceptos del Hermetismo, generados por el Génesis, donde nos señala que Adám fue creado a imagen y semejanza de Dios, es decir varón y hembra, porque Dios es andrógino. Por otra parte, según las palabras pronunciadas por el Creador, nos da la idea de estar hablando en Plural. Si tienes alguna duda, lean el Génesis, en su verdadera traducción del hebreo, donde dice: “…Y dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza…” luego esto implica que, si Dios hizo a Adám a Su plural imagen y a “nuestra semejanza” entonces se trata de una creación andrógina, una operación por dos esencias divinas, representadas por Ischa la hembra, cuyo nombre sagrado está conformado por las letras hebreas Aleph-Yod-Shin y por Isch, o principio varonil, que en hebreo significa “hombre”.
En el Génesis se habla de estas dos esencias interviniendo en la creación humana, y a nivel biológico, es bien sabido que, es la unidad cromosómica impar “XY” la que define el sexo masculino en el feto, mientras que la unidad cromosómica par “XX” define el sexo femenino.En otro aparte... Antes de la caída de Adám, como lo esboza la Biblia en su pasaje de la tentación de Adám a causa de Eva y tal como Platón y Pitágoras lo manifestaron, este, en el mundo Briáhtico, no requería de un cuerpo físico, le era suficiente el de la Luz Astral para cumplir la unión, teniendo entendido que este último cuerpo, corresponde a la región cósmica donde se elaboran las formas y donde se efectúa las TRANSFORMACIONES esenciales de las individualidades terrestres, siendo allí donde se encuentran y mandan todas las fuerzas de disociación, que por supuesto separan el bien del mal; el ser del no ser y de todo aquello que se niega a ser y desde allí desciende a Yetsirah que es el Jardín del Edén, donde, por supuesto, los aspectos de varón y hembra ya separados, asumen sus respectivos roles de activo y pasivo que se corresponden al Espíritu o ADAM y al Alma o EVA.En conclusión: El simbolismo de la creación nos lleva ha ver el descenso de Adám a través de los cuatro mundos: el mundo de Atziluth o Emanación; el mundo de Beriah o Creación; el mundo de Yetsirah o Formación y finalmente el mundo de Assiah o Acción, siendo este nuestro camino de descenso, porque en cada uno de nosotros está contenido ese Adám y esa Eva y para que Adám y Eva o nosotros podamos recuperarnos, debemos asumir el Ascenso, haciendo conciencia de nuestro Espíritu-Adám y de nuestra Alma-Eva, evolucionando del plano físico o Assiah, retornando al Jardín del Edén o Yetsirah, elevándonos al Reino de los Cielos o Briah, para finalmente unirnos –el Yug- con la Fuente Divina, Viendo al Gran Arquitecto del Cosmos faz a faz en Atzilouth.Pero continuando con la parte histórica…
La idea de Dios-Padre único, que tuvo su germen en la cultura judío-cristiana, cobró fuerza con la manipulación de Pedro y Pablo de las verdaderas enseñanzas del maestro Jesús, y se fortaleció en las doctrinas del gnosticismo, en las de la iglesia romana, en las del protestantismo y en las de todas las iglesias cristianas fundamentalistas actuales, discriminando la esencia divina en la Mujer.Indiscutiblemente y a través de la historia contada desde hace aproximadamente 6000 años atrás, podemos ver que el concepto de lo femenino ha estado rodeado de gran cantidad de tabúes, y sujeto a unos patrones y comportamientos determinados, según los cuales, la mujer “debe” estar relegada a la sumisión por parte de la sociedad, por su familia, por la pareja y la familia de su pareja, porque se convirtió en un objeto y esclava sexual y de reproducción. Todo ello ha conllevado a que la mujer durante todos los tiempos de la era judeo-cristiana y en la actual se encuentre denigrada, en un claro estado de inferioridad y menosprecio.Para el pensamiento occidental la Mujer siempre ha sido una parte del hombre, concepto este enraizado en la premisa de que Eva fue creada de una costilla de Adán, para el pensamiento oriental la Mujer es la compañera sublime del hombre.En la parte material, la Mujer representa el Ser Humano Femenino, o el Femenino-Creador.
En la parte esotérica, representa la Diosa Madre, la Madre Tierra, la energía Yin. Así podemos considerar a la mujer como el tipo más alto de la belleza terrestre; pero la belleza terrestre está vinculada a la manifestación de los atributos divinos.Oriente siempre ha sabido apreciar el fondo intangible de las influencias energéticas y las de las fuerzas vitales, generadoras de todo lo tangible que está a nuestro alrededor. Igualmente contemplaron lo insondable e indefinido del universo desde donde parte toda la fenomenología de la existencia cósmica percatándose del potencial invisible e ilimitado del cosmos para generar a partir del NO SER el milagro del SER de todos los seresEste gran útero o gran óvulo cósmico no fecundado, pero lleno de vida, capacitado para ser el origen, podemos considerarlo como la manifestación del Principio Único en su esencia femenina en donde se encuentra la Shekina, la cual es idéntica al Gran Todo, solo se diferencia por el estado y por la naturaleza. Este atributo divino en las religiones orientales es considerado la gran Matriz Cósmica o sea la Madre Celeste, o lo que el Génesis expresa como: “… las tinieblas reinaban sobre la faz del abismo...”.
Es decir el principio del principio.Por otra parte, tenemos que comprender que la matriz, la madre de todas las cosas, es el verbo SER, eternamente en acción y representado por Dios en la formación de Eva (mitológicamente una primera mujer), la cual puede ser considerada como el radio (el medio, la posibilidad) para expandirse en el mundo en manifestación y que está muy bien simbolizado por el circulo, caracterizado a su vez, en si mismo, por las 22 letras del alfabeto hebraico (las 22 letras divididas entre los siete planetas dan esta fórmula universal de Pi, o dicho de otro modo 22 dividido por 7 es igual a 3,1428571).En la Religión Antigua, la que ha existido siempre: el Yug, el Tao y la Vía al igual que todas las cosas y todos los fenómenos tienen dos aspectos: un aspecto Yin (femenino) y un aspecto Yang (masculino).
Esto se halla directamente unido a la im-permanencia del mundo manifestado, a la alternancia de los contrarios, y representa el fundamento mismo del movimiento perpetuo del universo. Ningún fenómeno persiste eternamente en su naturaleza particular. Los criterios de la vida se definen en comparación con la muerte, el alivio solo se percibe en relación con el dolor, la felicidad en relación con la infelicidad, el día en relación con la noche, el movimiento solo es perceptible en referencia a la inmovilidad. Así pues, el espacio, el tiempo, la naturaleza, la condición humana y todos los fenómenos perceptibles –ya sean abordados por la ciencia, la filosofía, el arte o cualquier dialéctica fundada en la dualidad– pueden expresarse en términos de Yin/Yang. Esto explica que la teoría del Yin/Yang sea omnipresente en las culturas tradicionales, en la medicina, la astronomía, la agricultura, la política, la caligrafía, la pintura, la música, la arquitectura, la cocina, las artes marciales, el ajedrez y por supuesto en los conceptos esotéricos e iniciáticos.
Cuando se dice que el Yin y el Yang son interdependientes, significa que la condición previa a la existencia del uno es la existencia del otro, y que son recíprocamente útiles. La disociación completa del Yin y del Yang marca el agotamiento, el término de la vida. En ciertas condiciones extremas, el Yin y el Yang no se conforman con oponerse y compensarse. Puede producirse una transformación total de un aspecto en su contrario.Nosotros, los Qabbalistas consideramos de gran importante encontrar la Shekinath o Diosa Madre para hacer la transmutación de Malcuth a Kether y reintegrarse dentro del AIN-SOPH (el absoluto). Siendo esta la Alquimia Espiritual de la Gran Obra transmutadora de los misterios.
Pero que es la Shekinath…?
La Shekinath o Shekinhá es el soplo, el espíritu, la inmanencia de Dios en el Universo, es la Entidad Divina Femenina, considerada la Fuente de la Vida, ya que es a través de ella que el hombre se mantiene en contacto con el mundo divino. La Shekina es el lazo (quesher) vivificador. Ella se presenta en los cuatro mundos (Atziluth-Briah-Yetzirat-Assiah). Es el vestido precioso y resplandeciente que se manifiesta por los Sephiroths. Es la Shakti en la Yoga, que debe recorrer las seis etapas (los 6 planos del árbol Sefirótico en Qabbalah o los seis Grados simbolizados por los Chakras en Yoga) que son los seis grados iniciáticos antes de alcanzar la Maestría (Séptimo grado).
Es la Diosa Kali (principio femenino de Shiva) con sus cuatros brazos o direcciones y/o elementos fundamentales del universo.La Shekinath existe en todos y para todos y es, a fin de realizarlo, que, durante las ceremonias del Rosch Hashanah, el oficiante en la sinagoga, aun actualmente, vuelve a extraer los tres sonidos del cuerno del carnero simbólico.Cada persona vive bajo la influencia de dos grandes campos de energía. Por debajo de nosotros se encuentra continuamente la fuerza de la Tierra.
Por encima nuestra, la energía del Cosmos. Para entender la influencia de estas energías en las personas y el impacto que ello supone en nuestras vidas lo primero que hay que entender es que TODO se encuentra en continuo movimiento y cambio de energía. Este hecho fue especulado y descubierto hace más de 20 siglos. Sin embargo, es la raíz para entender la naturaleza del principio y el fin de hace cientos de años atrás, como el actual.
Mynerva Modesta.
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